El artista cántabro afincado en Madrid encuentra un nuevo lugar feliz y una nueva obsesión: una habitación con vistas al plastic soul de mediados de los 70, un apartamentito en la Nueva York más oscura y vibrante…
Betacam acomete con audacia y devoción la empresa imposible de disfrazarse del rey del disfraz en esta oda a la larga decadencia del imperio estadounidense.
Norteamérica triste está producida por Brian Hunt y cuenta con el gran Ramiro Nieto a la batería.