“Jardín” es el cuarto adelanto de Esperancero, una canción que profundiza en una fractura emocional desde un lugar frío, casi clínico, donde la ruptura no se llora; solo se da fe de ella.
A través de una producción en ocasiones contenida y en otras desbocada, que combina paisajes electrónicos con elementos acústicos muy cuidados, El Faro da forma a su pieza más experimental hasta la fecha, una que suena a eco interno: una habitación vacía donde resuena una voz que no acusa, solo constata que ya no hay nada.
Una canción sobre aceptar que el amor es asimétrico y que, por más que lo deseemos, no fuimos tan especiales para alguien como esa persona lo fue para nosotros. Un lugar donde van a parar los restos emocionales cuando todo lo demás ya se ha ido. El silencio que queda al otro lado cuando, tras una ruptura, te das cuenta de que solo tú te has roto.